Estos dos grandes diamantes decorativos comparten características y cualidades comunes, a saber, un alto índice de refracción y una notable pureza óptica. Aunque tienen formas diferentes, ambos están hechos de cristal K9, un verdadero vidrio óptico, es decir, utilizado en tecnologías ópticas como el láser o las lentes ópticas para cámaras, por ejemplo. El cristal K9 es muy denso, el peso del "diamante" el más grande, con un diámetro de unos 18 cm, es de unos 6 kg, lo que hace un peso total de 12 kg para ambos. Estas cualidades ópticas excepcionales también permiten pulir el cristal K9 a la perfección, manteniendo un índice de dispersión muy bajo, un índice de refracción elevado y una claridad notable. Todo ello permite que estos dos objetos brillen en su salón como si fueran auténticos diamantes pero con un tamaño totalmente desproporcionado al que conocemos en joyería. Están perfectamente cortados con bordes afilados y superficies perfectas. El número de caras y, por tanto, de ángulos, multiplica los efectos de reflexión y refracción para el mayor placer de los ojos. Un accesorio de decoración cuyo minimalismo es extremo y que, sin embargo, será uno de los elementos más deslumbrantes de su decoración tanto si lo ha instalado en su mesa de centro, en el estante de una librería, en la parte superior de una consola o incluso en la repisa de su chimenea. Dé a su interior el brillo de un diamante con este par de objetos multifacéticos y adamantinos.
Desde el antiguo Egipto, el vidrio ha fascinado a la gente por su transparencia, especialmente en el caso del vidrio fabricado por artesanos sopladores de vidrio. Estos calientan una bola de vidrio en el extremo de una caña, soplan en ella para que se hinche, mientras la hacen girar y le dan diversas formas con herramientas. El vidrio puede trabajarse a temperaturas muy altas, como el metal, y luego se vuelve muy duro y quebradizo cuando se enfría. Tanto si se trata de cristal como de vidrio hecho a mano, Eichholtz ha asumido este saber hacer colaborando con los mejores talleres de vidrio para ofrecernos luminarias y objetos decorativos magníficamente realizados en vidrio y cristal claro, es decir, transparentes.