Silla plegable Bolsena de Eichholtz con acabado marrón anilina

Una silla plegable se considera auxiliar y, por lo tanto, se fabrica generalmente pensando en la economía y la eficiencia, lo que nos da unos muebles con una personalidad relativamente poco afirmada. Si observa la silla Bolsena de Eichholtz, se dará cuenta inmediatamente de que la economía no fue la consideración principal en el diseño y la construcción de esta silla plegable. Se inspira claramente en el estilo colonial con sus materiales de "guarnicionería", y destaca en muchos aspectos, tanto en el estilo como en los materiales. La estructura es de madera de teca con montantes que imitan las gruesas cañas de bambú con un acabado de laca marrón brillante y oscuro. Las cuatro cimas de los cuatro montantes principales, dos para el respaldo y dos para los brazos delanteros de la silla, están adornadas con elementos esféricos en forma de pomos, que contribuyen a la forma y el acabado de esta creación. Los brazos laterales también son únicos, ya que adoptan la forma de dos anchas y gruesas correas de auténtico cuero marrón, unidas al armazón de la silla mediante hebillas de latón dorado envejecido. El respaldo y el asiento se completan con con paneles de cuero tensado en un color marrón anilina que acorda maravillosamente con el tono de los demás elementos. La delicadeza y la autenticidad de los materiales elegidos, la perfección del trabajo artesanal que ofrece un acabado impecable y, sobre todo, la originalidad y la clase de esta reinterpretación del estilo colonial hacen de esta silla un elemento de su mobiliario e interiorismo que hará que su casa no se parezca a ninguna otra, reivindicando al mismo tiempo un estilo colonial y retro cuyo encanto y carácter parecían haber sido olvidados. Eichholtz nos sorprende al atreverse y aventurarse, con éxito, en un territorio estilístico que no suele ser el suyo.