Lleve la belleza de la naturaleza a su hogar con la mesa de centro Barrymore. Una esbelta estructura de acero inoxidable pulido sostiene un grueso trozo de madera petrificada que debe su carácter único a sus distintos granos, nudos y agujeros. Mesa de centro de diseño con una altura de 35 cm. El tablero mide 115 cm por 68 cm y está hecho de madera fosilizada extraída de Indonesia. La edad del espécimen se sitúa entre los 20 y los 40 millones de años. El tablero tiene una serie de agujeros que se formaron de forma natural en el proceso de desecación del tronco del árbol. Estas cavidades se conservan en estado fosilizado, lo que puede verse en el hueso de la sierra. La madera ha sido sustituida por minerales a base de cuarzo con impurezas que le dan un color agradable. La corteza fosilizada puede verse en la pieza final, cuya superficie forma un peculiar relieve. La mesa de madera petrificada es práctica y requiere muy poco mantenimiento. Combina bien con los elementos étnicos en el diseño de interiores y servirá como decoración de su hogar. Impresionante y única mesa de centro de acero inoxidable con tapa de madera petrificada de Eichholtz. incorporando una delgada construcción de acero inoxidable con cuatro patas inclinadas.
La madera petrificada es un tipo de fósil en el que la materia orgánica es sustituida por minerales (normalmente silicatos como el cuarzo) mientras se conserva la estructura original de la madera. El proceso tiene lugar en el subsuelo cuando la madera queda enterrada bajo los sedimentos y acaba conservándose debido a la ausencia de oxígeno y, por tanto, no se descompone. A medida que el agua rica en minerales fluye a través del sedimento, los minerales quedan atrapados en las células vegetales y, al descomponerse la celulosa, se forma una piedra en su lugar.
Cada mesa es única, ya que no hay dos iguales en color, tamaño o forma, y está garantizado que se convertirá rápidamente en un interesante tema de conversación entre sus invitados. El proceso de fosilización hace que los muebles de madera petrificada sean extremadamente raros y visualmente magníficos, lo que permite crear piezas de mobiliario exquisitas y únicas. Cuanto más grandes eran los troncos originales, más largo era el proceso y más sorprendente el resultado. Esta mesa de centro de Eichholtz, con una longitud de 115 cm, es un mueble extraordinario en dos sentidos.