Clásica y elegante, esta gran lámpara de mesa de Eichholtz quedaría muy bien en los mostradores de los hoteles más lujosos o en los escritorios de las oficinas más prestigiosas. Esta lámpara por sí sola es una definición de la unión perfecta entre diseño y lujo. La estructura metálica está acabada en plata, lo que contribuye activamente a este enfoque lujoso, mientras que la base escalonada se asemeja a un lingote de plata sobre el que descansan verticalmente estantes de metal niquelado, negro y vidrio ahumado o esmerilado, con una interesante mezcla de materiales, texturas, transparencias y luminosidad. El resultado de este sencillo montaje es, paradójicamente, muy sofisticado y evoca una moderna creación de diseño artístico. Estos elementos verticales están unidos por varillas horizontales hechas de tubos plateados que atraviesan las diferentes "capas" verticales y pueden verse a través de los elementos dependiendo del nivel de opacidad y transparencia de estos últimos. Esta lujosa y original base está coronada por una pantalla paralelepipédica de esquinas redondeadas, vestida con un elegante tejido de terciopelo gris plomo. El interior de la pantalla está forrado con tela dorada para difundir una luz cálida y rica, especialmente hacia la base. Le encantará la elegancia, el lujo y el equilibrio perfecto de esta gran lámpara de mesa de Eichholtz.