El oro y el negro se unen de nuevo, aquí en forma de metal dorado brillante y mármol negro, para crear una lámpara de salón cuya elegancia y belleza recuerdan a los diseños Art Decó del siglo pasado. Es de gran diseño y sencillez de formas, pero también de gran originalidad y delicadeza, con una base arqueada que forma un pequeño pedestal circular sobre el que se asienta una profunda y brillante esfera negra de mármol macizo muy pulido. Esta bola de mármol, de unos diez kilos de peso, se presenta así y se destaca a la manera de un objeto de arte abstracto, para que se pueda admirar su pureza, tanto en el color como en la forma o incluso en el material. La lámpara se transforma así en un estuche o pedestal para esta enorme y lujosa perla. Esta singular y atrevida base está rematada por una gran pantalla cilíndrica de 48 cm de diámetro, de tela blanca, que adquiere un tono marfil cuando la lámpara está encendida. El pie es visualmente grande, por lo que es difícil darse cuenta del tamaño de esta lámpara en una foto con fondo blanco, considere que efectivamente tiene 80 cm de altura, lo que la hace a la vez elegante e imponente.