La lámpara de sobremesa Dupoint blanca será sin duda el centro de atención en su diseño interior. La base de esta lámpara de cerámica hecha a mano presenta un hermoso relieve que representa un fresco de carpas koi. Viene con una pantalla de tela blanco roto. Sus motivos en relieve, finamente grabados y esculpidos, se inspiran en los motivos impresos del Lejano Oriente, incluida la famosa carpa Koi, verdadero símbolo de la cultura japonesa, que representa la valentía, la perseverancia, el coraje y el amor.Este legendario animal puede alcanzar un tamaño espectacular de más de un metro y pesar unos 15 kilos. Presentado aquí en inmaculada porcelana blanca, este fresco en relieve, sirve como soporte de lámpara con una silueta acampanada que es a la vez clásica y muy elegante. La lámpara descansa sobre una base de anillo negro brillante, creando un hermoso efecto de contraste, y está coronada por una pantalla cónica de tela blanca que combina perfectamente con el color y la textura de la base. Con sus 96 cm de altura, también destacará como uno de los objetos decorativos más bellos y refinados de su casa, especialmente si lo coloca como pieza central de una refinada mesa consola de estilo oriental.
La leyenda de la carpa Koi se ha transmitido de generación en generación en Japón como un cuento legendario para niños. Se dice que cada año, en la tercera luna, miles de carpas koi abandonan el mar para remontar el río Amarillo y acabar reuniéndose al pie de la cascada de la Puerta del Dragón. Para ello, tienen que enfrentarse a muchos enemigos y depredadores, no debilitarse ante la fuerza de las corrientes contrarias, evitar a los pescadores y muchos otros peligros. Sólo las más atrevidas alcanzarán la cima de las violentas cascadas y tendrán entonces el privilegio de transformarse en dragones con magníficas escamas doradas.
El blanco es un color tranquilizador, brillante y zen. Si bien no es recomendable crear un ambiente decorativo compuesto enteramente por elementos blancos, saber incorporar algunos elementos blancos a su entorno puede aportar un toque original y muy positivo a su habitación, gracias a su imagen de pureza universal y a su excepcional luminosidad por definición. El blanco es intemporal y combina magníficamente con las nuevas tendencias, como el minimalismo, el estilo escandinavo y el diseño. Cuando se utiliza en las paredes, este color amplía visualmente el espacio, añade luminosidad al no absorber la luz y realza los colores, texturas y materiales circundantes con los que no compite. Fresco, refinado, urbano, el blanco puede armonizar con la madera, la tela, el metal, el ratán, el mármol, es claramente el color básico más universal. Eichholtz aprovecha la belleza inmanente del color blanco para ofrecernos numerosos objetos, a menudo de gran tamaño, que en este color aportan todo su simbolismo y frescura a nuestros interiores.