Magníficamente decorativo y a la vez práctico, este gran jarrón de cristal fino tiene forma de urna grande con una decoración de cabujones de cristal en la tapa. Este gran recipiente será perfecto para ofrecer a sus invitados malvaviscos, fruta, flores, caramelos, almendras azucaradas, café, sémola, frutos secos, pasta, arroz, pequeñas galletas y todo tipo de dulces. Puede utilizarse de infinitas maneras y añadirá un delicioso toque vintage y retro a su hogar, atrayendo la atención y despertando el deseo, según el contenido que elija. Tanto si utiliza esta urna vintage en solitario como en un conjunto que combine diferentes modelos, su unión de decoración y delicadeza no dejará a nadie indiferente. Si alguien le señala que se trata de una verdadera tentación por su parte, siempre puede explicar que eligió este tipo de contenedor por su practicidad para mantener su cocina perfectamente organizada. Este modelo es bastante grande, con un diámetro de 19,5 cm y una altura de 56 cm.
Desde el antiguo Egipto, el vidrio ha fascinado a la gente por su transparencia, especialmente en el caso del vidrio fabricado por artesanos sopladores de vidrio. Estos calientan una bola de vidrio en el extremo de una caña, soplan en ella para que se hinche, mientras la hacen girar y le dan diversas formas con herramientas. El vidrio puede trabajarse a temperaturas muy altas, como el metal, y luego se vuelve muy duro y quebradizo cuando se enfría. Tanto si se trata de cristal como de vidrio hecho a mano, Eichholtz ha asumido este saber hacer colaborando con los mejores talleres de vidrio para ofrecernos luminarias y objetos decorativos magníficamente realizados en vidrio y cristal claro, es decir, transparentes.