El negro y el oro vuelven a ser invocados y combinados por Eichholtz para ofrecernos una gran consola con una tapa rectangular de cristal de 12 mm de grosor que descansa sobre una original estructura de seis patas lacadas en negro completada en su base por una serie de 12 listones dorados y altamente pulidos dispuestos a modo de travesaños cruzados y superpuestos. El número y el apilamiento de estos elementos recuerdan a las cintas doradas que se hubieran estirado y atado alrededor y entre los pies. El borde inferior de la bandeja también es de acero inoxidable dorado de alto brillo. Los travesaños que se cruzan entre las patas están unidos a éstas por piezas cilíndricas de rosca, que se distinguen por su perfecta ejecución y también por su acabado dorado de alto brillo. La ventaja de haber instalado numerosos adornos en la parte inferior de este mueble es que, una vez completado con los elementos decorativos que haya elegido instalar en su parte superior, habrá un equilibrio de densidad visual entre ésta y la parte inferior del mueble, que a menudo puede parecer "vacía" cuando la parte superior de las consolas estan adornadas con objetos grandes y visualmente imponentes. Con el modelo de consola Strato, Eichholtz nos ofrece un mueble con un diseño atrevido y atípico, a la vez que retoma las recetas que han dado tanto éxito a sus creaciones "negro y oro".
La combinación de los dos colores más elegantes, el negro y el dorado, es una de las recetas favoritas de Eichholtz y nos permite descubrir y utilizar maravillosas creaciones, ya sean muebles, iluminación u objetos de decoración. Los dos colores funcionan especialmente bien juntos, ya sea para resaltar los muebles de estilo antiguo o las creaciones de diseño vanguardista. Lujoso, chic y glamuroso, el ejercicio requiere un perfecto dominio de las proporciones y las medidas, lo que es una suerte porque los diseñadores de la marca se superan y nos ofrecen notables creaciones para convertir nuestros interiores en verdaderos palacios.